El reproche es plenamente evangélico: “¡Hipócrita! Saca primero la viga de tu ojo y entonces verás con claridad para sacar la mota que está en el ojo de tu hermano”, la cita está extraída de San Lucas que, como algunos sabrán, relata palabras del propio Jesucristo. Cuando toda la prensa dedica sus mayores reproches a Rita Barberá, la exalcaldesa de Valencia, por que un juez, y el fiscal correspondiente, la han llamado a declarar para proceder o no a elevar su caso a un tribunal competente, con muchas menos alharacas mediáticas dos expresidentes de la Junta de Andalucía, ambos también ex presidentes del PSOE, imputados de hace tiempo declararan hoy mismo ante el juez en Sevilla. ¿Es normal esto para un país digno?

Las listas de imputados, ahora investigados, corroen a los partidos políticos españoles, batiendo records sin duda el PSOE y el PP con centenares de ovejas negras. Esta situación es lisa y llanamente vergonzosa sobre todo si se atiende al hecho de que, en ningún caso, ha sido el propio partido el que ha levantado la liebre. Basta recordar que las estrellas del corruptómetro de hoy Chaves y Griñán, no tiene cargo público por la exigencia de Ciudadanos para que Susana Díaz pudiera formar gobierno.

No entiendo nada. El PSOE y sus dirigentes hablan de le necesidad de que el PP pase a la oposición por la corrupción en sus filas. ¿Es pura hipocresía o es que Chaves, Griñan y los más de 275 imputados en los ERE de Andalucía se afiliaron al PP a escondidas? ¿Alguien me lo explica?