Junqueras, la demagogia bondadosa


Si bien hoy quería comentar la carta a The Times de Sir John H. Elliott, el más prestigioso de los hispanistas vivos, Cruz de Sant Jordi y Premio Príncipe de Asturias, donde al final recomienda, como única solución posible a la cuestión catalana y por ende a la española, “entablar un diálogo civilizado dentro de los confines de la ley”, unas declaraciones de Oriol Junqueras a una televisión privada han hecho que sin dudarlo cambie de tema. El bondadoso líder de Esquerra y Vicepresidente del Gobierno catalán, que parece no haber roto nunca un plato en su vida, decía: “nosotros estamos comprometidos con la democracia y con el derecho al voto de los ciudadanos” para añadir hablando del gobierno central que “es muy difícil estar comprometido con la democracia y decir que nos vas a dejar que los ciudadanos voten, es muy difícil imaginar una democracia donde se prohibía a la gente votar o donde se detengan a las personas, por cierto personas honradas, honestas trabajadoras, y que quien ordena estas detenciones son políticos de un partido que todo él está imputado o investigado por corrupción”. Es muy difícil hacer más demagogia en tan poco texto aunque se supera a si mismo cuando añade que “cada cual es responsable de lo que es responsable, nosotros de hacer el bien y de tomar las mejores decisiones al servicio de lo ciudadanos…”. Si entendemos por demagogia la estrategia utilizada para conseguir el poder político apelando a prejuicios, emociones, miedos, esperanzas y, como no, a las mentiras, ¿cómo se califica el texto de Junqueras? ¿Quién prohíbe votar a todos los españoles sobre su propia nación? ¿Detiene el gobierno o la justicia? ¿A quién se ha detenido que no se haya saltado la ley? ¿Qué tendrá que ver que en el PP haya corruptos, y muchos, con sus actuaciones legítimas como Gobierno? ¿Ellos, Junqueras y Puigdemont, hacen el bien saltándose ley, las decisiones de los tribunales y los procedimientos? Dios le ayude a volver a la cordura…

No entiendo nada. Leídas las declaraciones de Junqueras, ¿es legítimo para un dirigente político pervertir conceptos como democracia usando tanta demagogia? ¿Alguien me lo explica?


Un comentario en «Junqueras, la demagogia bondadosa»

  1. A Junqueras : que cuando hable de corrupción recuerde también al Molt honorable, y familia, que en todos los sitios se han cocido habas. Igualmente digo que la corrupción hay que combatirla, venga del partido que venga.

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