Francisco Oya: ‘Pedimos ahora que el Estado recupere las competencias de Educación, que en mala hora se cedieron’


Conversación tranquila de @jmfrancas con Francisco Oya (@FranciscoOya1). Profesor de Historia disidente frente al adoctrinamiento de la Generalitat y la falta de respeto a los derechos culturales y lingüísticos de la mayoría de la población catalana.

Tuitter:@jmfrancas Webhttp://sinpostureo.com bloghttps://www.noentiendonada.es, You tubehttps://www.youtube.com/channel/UCUGcEzxyMJwuOCBNnjwPDxg?view_as=subscriber

JMF: ¿Qué has hecho que te han castigado?

Francisco Oya: Larga disidencia desde los años 90 en que se fundó Profesores por el Bilingüismo.

JMF: Y, ¿ahora?

Francisco Oya: Me he negado a admitir censura de mis materiales didácticos por el director. El cual ha iniciado una campaña de calumnias contra mí, usando a los CDR de Les Corts y Gracia, así como a la prensa catalana subvencionada, a un periódico digital concreto, en realidad: El Món.

JMF: ¿Censura? ¿De qué en concreto?

Francisco Oya: Unos textos de autores ligados al catalanismo político. Desde Prat de la Riba a Heribert Barrera, pasando por el Dr. Robert. Eran textos de un supremacismo abierto y bastante repugnante.

JMF: ¿Y?

Francisco Oya: Los he proporcionado para que los alumnos tuvieran un contrapunto a la leyenda rosa del libro de texto, cuyo autor es Agustí Alcoberro. Trataba de que mis alumnos de 2º de bachillerato aprendieran Historia real y no los mitos del nacionalismo. Al director no les gustó porque dijo que “hacían quedar muy mal al catalanismo” y pretendió decirme en cada caso el material que podía y no podía entregar. La verdad es que no podía dar crédito a lo que oía. Era demasiado incluso para el nivel de falta de libertad académica en la escuela catalana. Después de más de 3 décadas dando clase, no estaba dispuesto a soportar semejante intromisión, absolutamente injustificada y a partir de ahí, empezó una campaña de acoso laboral realmente espectacular.

JMF: ¿Te denunció algún alumno?

Francisco Oya: Primero el director llamó a un periodista del diario digital El Món, Antoni Guerrero, y al fotógrafo Jordi Borrás, famoso por sus campañas de calumnias contra constitucionalistas catalanes. Fueron al centro y se entrevistaron con el director. Sacaron un artículo calumnioso, sin dignarse contrastar la información conmigo. En teoría habían hablado con alumnos, pero pude comprobar después de hablar con algunos de ellos, que en realidad los de El Món sólo hablaron con el director en su despacho. Hay un pequeño grupo de alumnos que pertenecen a la CUP, a la organización juvenil ARRAN. La imagen supremacista de sus héroes (Pujol, Prat de la Riba, etc.) rompía con la imagen que les han transmitido en el colegio. Tienen demasiado fanatismo en la cabeza, y no les interesa la Historia real sino los mitos que les han transmitido. En realidad la culpa no es suya. Hablamos de un centro público, uno de los que tiene más solera de Barcelona, el Juan Boscán (o Joan Boscà).

JMF: Centro muy conocido sin duda. ¿Desde cuando un profesor no puede llevar textos de su materia a clase?

Francisco Oya: El director es antiguo militante de la extrema izquierda. Como yo, en realidad. La diferencia es que él procuró adaptarse a la hegemonía del nacionalismo catalán. Hizo carrera política en el PSC. En realidad, ni siquiera en la época de Franco un director se atrevía a censurar el material didáctico de  un profesor. Es algo estupefaciente.

JMF: Pero, ¿se hace?

Francisco Oya: Por supuesto, contó con la colaboración de la inspectora de centro, la cual no se priva de exponer su ideología separatistas abiertamente en las redes sociales. En cambio el director pretendió decirme que no debía escribir artículos ni comentarios en las redes sociales exponiendo mis opiniones. Algo realmente increíble. En algunas ocasiones hay directores así de fanáticos, aunque este ya es un caso excepcional. Ten en cuenta que soy funcionario con plaza definitiva en el centro, y no ha tenido el más mínimo respeto ni ha sentido escrúpulos de utilizar a los alumnos de un modo vergonzoso.

JMF: Y a partir de ahí, ¿qué más pasó?

Francisco Oya: Pidió a un sector de alumnos que grabaran mis clases, expusieran mis materiales didácticos en las redes y dijeran que yo era un fascista peligroso, racista, machista y no sé cuantas cosas más. Me pusieron pancartas en la valla del instituto, así como en el interior del centro, tachándome de fascista. Promovió asambleas políticas fuera del centro, en horario lectivo, con la asistencia incluso de algunos alumnos de 4º de ESO. Está terminantemente prohibido por la normativa que los alumnos de ESO abandonen el centro durante la jornada escolar, pero él se lo pasaba por la entrepierna porque le interesaba que esas asambleas tuvieran la mayor asistencia posible. Estaban presididas por un miembro del Equipo Directivo, la profesora que ocupa el cargo de Coordinadora Pedagógica, así como de otros adultos. También permitió que un sector de alumnos de 2º de bachillerato me montara una huelga. De modo ilegal, pues deben comunicarse con 48 horas de antelación, pero él lo fomentaba. Me ponían carteles por todo el centro, con la connivencia del director. En fin, una situación de acoso increíble. Todo esto acabó reflejando en diversas informaciones de medios de comunicación.

JMF: ¿Cómo han acabado sancionándote?

Francisco Oya: Me abrieron un expediente por haberle infringido yo “daños morales al director”, por ser “un machista, sexista y homófobo”, por no “cumplir con mi horario de trabajo”. El expediente era auténticamente surrealista y me lo abrió el director. Presenté documentación, en las alegaciones, que lo desmentían todo. Solicité testificales y diversas pruebas que denegaron, dejándome en una indefensión absoluta. Pero he puesto un contencioso administrativo.

JMF: Y,  te cayó una sanción… ¿En qué consiste?

Francisco Oya: La sanción consiste en 10 meses de suspensión de empleo y sueldo, algo absolutamente desproporcionado.

JMF: ¿Cuánto tiempo llevas en ‘profesores por el Bilinguismo’?

Francisco Oya: En Profesores por el Bilingüismo llevo desde el año 1994.

JMF: Y no precisamente escondido…

Francisco Oya: Jamás me he escondido ni ocultado mi postura crítica frente al sistema de enseñanza que ha diseñado el separatismo catalán y después de tantos años, como te puedes figurar, no estaba dispuesto a decir “sí bwana” cuando un director pretende violentar mi libertad de cátedra.

JMF: Eres muy conocido por tu disidencia, ¿por qué entonces ahora esta persecución?

Francisco Oya: Por lo demás, he dado el temario íntegro de selectividad y mis alumnos sacaron unas notas magníficas en las PAU. Esta persecución vino el año del ‘Prosés’, durante la aplicación del artículo 155. El Departamento de Enseñanza de la Generalitat intentó demostrar que seguían mandando en los profesores catalanes y que nada había cambiado en sus objetivos políticos de convertir la educación en un sistema de adoctrinamiento nacionalista, tal como queda establecido en el famoso ‘Programa 2000’ de Convergencia i Unió, que fue filtrado a la prensa en 1990, si no recuerdo mal, y el Ministerio de Educación dejó hacer, a pesar de que en ese momento tenía el control directo de la Enseñanza en Cataluña.

JMF: Además del recurso, ¿qué harás?

Francisco Oya: Creo que hay motivos suficientes para llevar el tema por lo penal. Entiendo que hay una prevaricación clamorosa en la resolución del expediente, así como delitos de odio. Pero es una apreciación personal, no soy jurista, tendré que solicitar asesoramiento legal.

JMF: ¿Qué hacéis ahora en ‘Profesores por el Bilinguismo’?

Francisco Oya: Lo mismo que siempre. Intentamos denunciar el adoctrinamiento en las aulas y luchamos contra la imposición del catalán. Promovemos un sistema de libre elección de la lengua oficial de enseñanza, castellano o catalán. Pero ya no confiamos en que esto sea posible con las competencias educativas en manos de la Generalitat. Por eso pedimos ahora que el Estado recupere las competencias de Educación, que en mala hora se cedieron. De hecho es una situación que no se da en ninguno de los países de nuestro entorno. Pero la mayoría de profesores constitucionalistas o simplemente críticos tiene miedo de exponer abiertamente sus opiniones. Al final será una decisión que deberá tomar el gobierno de España, sea del color que sea. Eso o la secesión de Cataluña a medio plazo.

JMF: El resultado electoral no parece que sea favorable a estas demandas…

Francisco Oya: Al final esta necesidad se impondrá. Con un gobierno español de derechas o de izquierdas. Eso, repito, o la definitiva ruptura del Estado.

JMF: Gracias Francisco, ánimo y un abrazo.

Francisco Oya: Gracias a  ti José María. Un abrazo.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *