Fanatismo


Fanatismo es, según la RAE, “apasionamiento y tenacidad desmedida en la defensa de creencias u opiniones, especialmente religiosas o políticas”. Al hablar del ‘procés’ y especialmente de su defensa a ultranza a día de hoy y, sobre todo, de los argumentos usados para ello, es difícil no remitirse a este concepto. Es lógico que el independentista quiera la independencia, va de suyo. Es normal que intente convencer a cuantos más mejor, si está realmente convencido. Es congruente que agote todas las vías posibles para conseguirlo, si cree en ello. Pero llega un momento en el que esa tenacidad en el objetivo, se da de bruces con la realidad y debe contenerse para no caer en lo desmedido que supone el fanatismo. ¿Qué es sino fanatismo enfrentarse a toda la legalidad y seguir insistiendo? ¿Qué es sino fanatismo confundir presos políticos con presos por saltarse la ley? ¿Qué es sino fanatismo hablar de Gobierno en el exilio cuando te han cesado por actos ilegales y te has ido huyendo de la cárcel?

Los responsables, fanáticos sin duda, de todo lo que ha acaecido en Catalunya, deben pasar por el juzgado y los jueces dirán lo que hay que hacer con ellos. No lloraré ni sufriré por ellos cuando haya sentencias definitivas, me gusten o no. Cuestión al margen, es que estos líderes fanáticos aún son capaces de congregar en Barcelona una manifestación a todas luces multitudinaria, no se si más o menos numerosa que la congregada por aquellos que, hartos de tanta manipulación, hace pocas semanas pedían ‘seny’ en vez de enfrentamiento.

No entiendo nada. Sigue el independentismo moviendo masas cuando incluso sus líderes hablan de declaración simbólica. ¿No ven los distintos políticos que ni Catalunya, ni España, se puede permitir el lujo de temer una sociedad tan dividida sin que ellos hagan nada ¿Alguien me lo explica?


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *