Me dice Juan Van Halen, Historiador y periodista


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¿Qué prioridades debería tener el nuevo Gobierno para hacer de España una
democracia plena y consolidada?


La pregunta refleja que ese nuevo Gobierno no sería del PSOE. También que la España
actual no es una democracia plena y consolidada. Sería un nuevo Gobierno que nacería
del acuerdo entre los dos partidos mayoritarios de la oposición, bien gobernando juntos
o uno de ellos apoyando al otro, al más favorecido en las elecciones previas. Llegaría al
Gobierno “la alternativa”; eso es democracia. Lo que el sanchismo, utilizando trampas,
quiere impedir desde usos autocráticos.
No entraré en demasiadas pormenorizaciones.

El nuevo Gobierno, en sus primeros días, deberá anunciar la derogación de todas las
leyes ideológicas y nocivas del sanchismo
, empezando por la ley de Memoria
Democrática, una afrenta a la realidad como fue, a los ciudadanos y a los historiadores,
que son quienes reflejan y valoran la Historia, con mayúscula, y no esa barbaridad de
reducir nuestra realidad histórica a una pugna inducida de buenos y malos, a juicio
cainita e ideológico del Gobierno. Sería un primer paso para la superación del
guerracivilismo como arma de enfrentamiento, iniciado por Zapatero y sublimado por
Sánchez. Igualmente se revisará la política de ayudas y subvenciones (desde sindicatos
y organizaciones empresariales, hasta todo tipo de entidades públicas y privadas) que no
serán vías para comprar voluntades.

El nuevo Gobierno habrá de cuidar, desde la verdad, la gestión económica en una
España que recibirá empobrecida y sangrada a impuestos, desde consideraciones falsas,
como el número de parados, la capacidad emprendedora, la inversión, y nuestro peso
económico en el mundo. Sobre esto y otras realidades económicas se nos ha mentido
desde una desvergüenza criminal. El sistema de financiación deberá ser igual para todas las Comunidades Autónomas.

El nuevo Gobierno deberá hacer público el estado real de la economía y no caer en
trampas anteriores, como ocultar la situación penosa que recibe. El ciudadano deberá
conocer la verdad. Es necesario un apoyo decisivo a la pequeña y mediana empresa,
ahora despreciada y a menudo colapsada por los impuestos. Reducción drástica y
rigurosa de impuestos.

El nuevo Gobierno deberá gastar mucho menos, promoviendo leyes presupuestarias
coherentes con la realidad y acabando con las alegrías ideológicas del sanchismo. La
primera medida será constituir un Ejecutivo reducido buscando la eficacia,
compensación, y coherencia entre los departamentos ministeriales Todo lo contrario a lo
que hemos visto en los últimos gobiernos.

El nuevo Gobierno habrá de rescatar pasadas decisiones positivas que el sanchismo
condenó al olvido o suprimió. En esta situación se encuentran el tan necesario Plan
Hidrológico Nacional y el apoyo a la energía nuclear
, vital en Europa y condenada hoy
a su desaparición en España. Igualmente habrá que afrontar una reindustrialización
progresiva rescatando planes y planteamientos despreciados por los últimos gobiernos.
Y una atención singlar a la agricultura y la ganadería, hoy tan olvidados.

El nuevo Gobierno deberá garantizar una Justicia independiente y hacer cumplir la ley
en todo el territorio nacional. Es democráticamente impresentable que haya leyes y
sentencias judiciales que no se cumplen en Cataluña, y que se haga arma política de
ello. La defensa y garantía de la separación de poderes es una de las esencias de la
democracia y hoy esté en grave riesgo.

El nuevo Gobierno deberá promover una nueva ley Electoral justa que impida que
partidos políticos puedan, presentándose en una sola Comunidad Autónoma,
condicionar los gobiernos nacionales con porcentajes de apoyo ridículos. Una nueva ley
de Partidos Políticos garantizará que no sean legales aquellos partidos que promuevan la
destrucción de la unidad nacional que protege la Constitución. Se vigilará especialmente
la acción de las llamadas “embajadas” de Comunidades Autónomas. Hay ejemplos
europeos en los que deberíamos mirarnos.

El nuevo Gobierno, basándose en la Constitución, hará respetar y defenderá la lengua
común
, respetando su uso en sus Comunidades. Que en el Congreso de los Diputados se
usen traductores es una afrenta a la Constitución, muy clara en este sentido Introdujeron
las distintas lenguas territoriales en el Senado, pero es igualmente inconstitucional.

El nuevo Gobierno asegurará la propiedad privada, reflejada en la Constitución, y
promoverá una ley que evite la ocupación de viviendas y, de producirse, que el desalojo
se realice de inmediato. Una política de vivienda realista, destinando a tal fin el ahorro
del gasto estatal que se propone, deberá garantizar a los jóvenes la posibilidad de
emanciparse.

El nuevo Gobierno dará un giro a su política exterior, especialmente cercana a
Hispanoamérica, y mantendrá relaciones de normalidad con Estados Unidos y las
grandes potencias, eludiendo el posicionamiento con dictaduras de Hispanoamérica
cuyo radicalismo y ataques a España son una negación de su propia historia.

El nuevo Gobierno mantendrá una política de inmigración justa y abierta. No seguirán
en España lo inmigrantes que cometan delitos y se limitarán las acogidas a la capacidad
real.de absorción

El nuevo Gobierno prestará especial atención al llamado cambio climático. Rigurosa,
realista y normalizada, sin desatender desde la exageración, el cuidado de los cauces de
los ríos y torrentes, la fauna y la flora. Como ejemplo de anormalidad, no han faltado
quienes acusaran de desatención al cambio climático los recientes incendios o las altas
temperaturas. En el verano de 1957, y así lo recoge la prensa de la época, se alcanzaron
50 grados en La Mancha, y todavía nadie sabía qué era el cambio climático; no existía.
Hay que separar un asunto natural del mensaje ideológico, un recurso más de la
izquierda.

Quedan un sinfín de propuestas en el tintero.


Juan Van-Halen. Escritor, periodista, académico correspondiente de la Historia y de Bellas
Artes de San Fernando. Senador en seis legislaturas. Su último libro: “Donde nombras la lluvia» (poesía). Ha concluido “Elogio de la incorrección política. Crónica del sanchismo hacia la autocracia” (ensayo).


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