Rebelión a bordo

8e4d849020912a8b2cf169a7d5fca59dEl hecho es que en el PP hay movida. Aprovechando que Bárcenas pasa ‘por Soto del Real’, algunos quieren deshacerse de Mariano.

Entiendo que gente importante del PP no acepte el que Rajoy gobierne en contra de la teoría política de su partido, máxime después de haber estado siete años teorizando sobre lo que convenía hacer para salir de la crisis y se rebelen.
Entiendo que gente muy destacada de España del entorno PP, que estuvo trabajado su programa electoral, esté convencida de que las medidas que toma Rajoy no son en absoluto las indicadas y quieran o un cambio de rumbo, que él les niega, o un cambio de cabeza de gobierno.
Entiendo que las personas honradas que hay en el partido o en su entorno inmediato, no estén dispuestas a convivir con gente que o ha tolerado o ha sido beneficiario de las prácticas que se desprenden de la información suministrada por Bárcenas, y que quieran un cambio de aires ante la incapacidad de la cúpula el actual PP para hacer limpieza.
Todo esto lo entiendo y lo comparto. Acepto por tanto, hasta la legitimidad de una trama para forzar un nuevo equipo y una nueva política. Ahora bien, si de lo que se trata es de aprovechar el momento para provocar un cambio de cromos y para aplicar sin más el quítate tú para ponerme yo, me perecería una maniobra del todo miserable.

El coste de la casta

32718a9ecd20ad48b5e58bd87f9a260bEl hecho es que ayer el BOE publicó las ayuditas que el Estado, es decir tú y yo, les damos a los partidos políticos para su seguridad y su funcionamiento. Cabe preguntarse para nuestra seguridad, dado el nivel de depredación que los partidos tienen, ¿cuanto nos paga el Estado? y la respuesta es bien fácil: nada.

Sumando este trimestre al primero solo hemos tirado en mantener el tinglado político la friolera de 21 millones de euros entre el PSOE y el PP, ¿no está mal no? Y lo peor es que a algunos, al menos al PP, con esta miseria no les basta. Necesitan un Bárcenas cualquiera, un Millet según se mire, para poder llegar a final de campaña.

Hace falta tener mucho morro y nada de vergüenza para esquilmar a las arcas públicas de este montonazo de pasta sin inmutarse. La democracia tiene coste nos dicen y eso exige un sacrificio al bolsillo del ciudadano. Manda huevos.

Censuras vendo…

2fe520ec93de6df7662ae7f7de70a000El hecho es que hoy Rubalcaba, después de pedir siete veces la comparecencia de Rajoy en el Congreso sin ninguna fortuna, ha decidido ordaguear en la octava: si Rajoy no comparece, promoverá una Moción de Censura. Sabe que la moción no tendrá la eficacia de conseguir ser gobierno, pero a decir verdad pocas armas tiene la oposición para enviar a las cuerdas a un presidente de Gobierno cuando cree que debe hacerlo.

Rajoy escurre el bulto y con él todo el PP. Bárcenas y/o Pedro J. acosan al presidente cada día con artillería nueva. La táctica del silencio no hace más que sembrar dudas. La batalla mediática empieza, ahora el Bárcenas contra Rajoy se complementa con ABC contra El Mundo. Mal vamos, parecen revivir los tiempos del GAL con Pedro J. desatado.El PSOE está en su derecho de presentar la moción, Rubalcaba también aunque no es fácil que la sociedad lo entienda. La sentencia evangélica de la paja en el ojo ajeno y la viga en el propio, será bien actual. De momento Rajoy es acusado de mentir –Rubalcaba en eso es el maestro- y de, como mucho, protagonizar o tolerar acciones nada honestas, pero la verdad es que acusado de delitos, ninguno. Rubalcaba por contra es el del faisán, delito donde los haya, y el jefe de los de los ERE, delitos a punta pala, que a su vez protege. Lo ideal si al final presenta la moción, es que se incluya en ella y toda esa tropa de políticos eternos que han sabido nadar entre la mierda hagan los bártulos, cojan sus cosas y, en un primer o último servicio -según se mire- sin más, desaparezcan.

Presuntos implicados

29fe5cb2790d06c778d6712866f18f04El hecho es que la fiscalía anticorrupción pide al Juez Ruz que cite a declarar en calidad de testigo a la Presidenta de Castilla-La Mancha y secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, en el caso de los papeles de Bárcenas para que explique el procedimiento de recepción de las donaciones anónimas percibidas por el partido. Al tiempo y en el mismo escrito el fiscal, Antonio Romeral, descarta que declaren en la Audiencia Nacional los anteriores secretario generales del PP: Javier Arenas y Francisco Álvarez Cascos. Cómo mínimo es curioso. La letra pequeña, la que no se lee, aclara que la propuesta de declaración afecta a la secretaria general o al ‘representante legal’  y eso ya es otra cosa.

Me da que ahora mismo Maria Dolores de Cospedal es otra pieza importante a tumbar. Tengo la sensación de que Bárcenas dispara a dos objetivos y uno de ellos y muy especial para él es la secretaria general, probablemente porque no se olvida que ella tuvo mucho que ver con su pérdida de peso en Génova. Es un ataque personal tal y como se desprende de la acusación concreta y nominal sobre las comisiones relacionadas con las basuras y el Ayuntamiento de Toledo que hemos conocido a través de Pedro J. La reacción de Cospedal hasta ahora en lo personal ha sido clara: querellas. Cuando te acusan de algo y no es verdad la querella es la clave, cuando te acusan de algo y es verdad tienes un grave problema. ¿Cuántas querellas conocemos de los presuntos implicados del PP?

Y ahora qué

4d8bfbcde17f94fdaf73eda64e9da15bEl hecho es que este domingo, Pedro J. Ramírez se ha quedado descansado. Bajo el titulo de ‘cuatro horas con Bárcenas’ ha conseguido darle marcha al ventilador y poner en primera línea de blanco a Rajoy, Arenas y de hecho a la mayor parte de la estructura del PP de los últimos veinte años. La duda y la sospecha ya se ha extendido: El PP, como antes el PSOE, se ha estado financiando durante veinte años ilegalmente y lo dice Bárcenas. Y, ¿ahora qué hacemos?

Pues algo habrá que hacer, ¿no? Dado que llueve sobre mojado, llevamos meses mareando la perdiz con el mismo tema, hay que aclarar si son insidias o acusaciones fundadas, si se trata de feas costumbres o de delitos y así hasta el final. Es inevitable judicializar el tema, Bárcenas debe ser citado por el juez y Pedro J. también. Bárcenas puede mentir, Pedro J. depende de en qué calidad vaya.

Hoy tenemos al PP tocado en su estructura nuclear y al PSOE andaluz en la cuerda floja. ¿No sería un buen momento para que todos aquellos que no tienen nada que ocultar dieran un paso al frente en ambas organizaciones y exigieran algo tan simple como la limpieza?